Como padres queremos que nuestros hijos elijan el bien con libertad, haciéndolo suyo. Las virtudes son el camino para alcanzar ese objetivo. Dicho camino no es ni corto ni sencillo; es por eso que, a través de las herramientas que nos brinda la disciplina positiva, empezamos a transitarlo desde el nivel inicial donde los niños comienzan a incorporar hábitos, que luego se transformarán en virtudes.
La selección de las virtudes realizada por los jardines responde a los períodos sensitivos de nuestros alumnos, proponiendo un enfoque positivo y preventivo. Existen planes de mejora de los alumnos. Se trabajan en tutorías familiares, docente a cargo, Directora y ambos padres. Dos veces al año y más reuniones de ser necesario. Este programa se inicia con actividades en gran grupo, donde se presenta la virtud traducida en una meta o consigna fácilmente recordable a lo largo de un mes.
Para este nivel desarrollamos nuestro Programa de Educación en Virtudes que brinda herramientas concretas y sencillas de la Disciplina Positiva para trabajar juntos jardín y familia.